Sexo domestico

Tengo un buen amigo con el que hablaba a menudo por el messenger. Un chico normal, simpatico. Le hablaba de mi trabajo, de mis hijos en fin de esas cosas cotidianas que forman parte de la realidad diaria.
Hoy hablando, pasando la tarde, comienza a escribir cosas raras y me propone sexo por internet, usando la palabra "jugar".
Yo no soy ninguna monja, por Dios, tengo 41 años y una vida sexual normal... pero joder sexo por internet sin conocerme.
Sociologicamente hablando es cierto que Internet nos ha permitido una comunicación que supera distancias, donde el tiempo en los ordenadores es igual para todos.
Es cierto que laboralmente nos permite desarrollar proyectos, obtener información, comunicarnos a tal velocidad y con tanta efectividad que parte de las tareas que hacemos a través de ella no las podríamos realizar revisando papeles en físico o esperando que llegue la información.
Pero desvirtua las relaciones sociales y sentimentales. Sobre todo permite un sexo al uso, que nos distingue de atracciones y de química!
Como puedes saber lo que hay detras de la pantalla!
Pero es que llevo tiempo "sufriendo" esta situación y de verdad es lamentable. Puro sexo pero además no del bueno joder! No es igual un beso, una caricia, un apreton caramba en persona, que esta historia que no es mas que un desahogo entre dos, o tres, o vayas tu a saber!
No me asusta la palabra sexo, y mucho menos lo que hacemos en nuestra vida con el. Lo que me sorprende e invita a la reflexión son estas situaciones tan frías y descontroladas que no permiten ni siquiera saber si te apetece o no.
Tengo una hija de 16 años y me preocupa que su vida sexual se limite a la pantalla. Creo que era mas sano desahogarse mientras se veian revistas en el cuarto de baño y no esta extraña mezcla de sensaciones informatizadas que no causan sorpresa alguna.
Quiero que mi hija disfrute de una caricia, un halago, yo que se aquello que yo he tenido cuando era más joven y que ahora con mis 41 años pierdo (yo y mucha gente) por ser este el medio que mas utilizamos para conocernos.
Sexo si, deseo si, pero no con la pantalla en medio por Dios!.